Exposición Individual / Solo Show

Galeria Tajamar, Santiago – Chile.  Julio/Agosto 2015.

 

Este trabajo es una instalación compuesta por materiales y objetos que hacen referencia a la geometría hexagonal, a la vida de las abejas y su régimen (re)productivo.

En ella se articulan nueve marcos trabajados de cera estampada, la caja de apicultura que las contiene, miel, un televisor que emite el video-registro de un panal de abejas en un poste de luz, una copia hecha en látex del suelo que rodea la galería, una serie de réplicas de cera estampada para panales hechas en látex pigmentado de color amarillo, un cuaderno de trama hexagonal, pintura de suelo e iluminación.

Edwards ejecuta, dispone y administra estos objetos en el espacio de la galería mediante una serie de movimientos y maniobras que provocan cruces y secuencias; para levantar dialécticas materiales entre las partes de esta instalación y su entorno arquitectónico inmediato. Así aparecen imágenes simbólicas, imágenes germinales y ficciones instantáneas entre su combinatoria.

Haciendo eco del sistema en que las abejas utilizan la geometría hexagonal para la construcción de una arquitectura masiva y de utilidad absoluta –donde nada sobra y nada se pierde– aparecen conexiones desparramadas (entre el techo de la galería y el suelo exterior que también tiene forma hexagonal, o entre las tablas de madera y los moldes de látex) como diagramas que se ensamblan en módulos correlativos.

El color violeta del suelo hace visibles las intensidades irregulares de los objetos dispuestos sobre él, tanto en densidad, transparencia, saturación, tamaño y forma.

La elección de este color alude al espectro de visión de las abejas, quienes son incapaces de percibir el color rojo percibiendo la luz solar desde el ultra violeta hasta el amarillo.

Edwards afina las estrategias de su pensamiento pictórico para generar un continuum entre el cemento de un poste de luz, entre el cúmulo de abejas y avispas muertas dentro de la caja de madera y los seis paneles de vidrio que delimitan la galería. Para solidificar, momentáneamente, las lógicas narrativas de la dispersión de la ciudad y dar cuenta de las fricciones entre su arquitectura, el estado de nuestra civilización y la naturaleza que nos delimita.

Jaime Alvarado